1- Desactivá los efectos de transparencia
Los efectos de transparencia pueden mejorar la experiencia visual pero consumen muchos recursos del sistema que podrían usarse para tareas más importantes.
Para deshabilitar esta opción simplemente hacé clic derecho en el escritorio, seleccioná “Personalizar”, luego “Colores” y destildá “Efectos de transparencia”.
Muchas aplicaciones se inician automáticamente cuando prendemos la computadora, esto puede demorar varios minutos el inicio, y exigen a la PC innecesariamente.
Para deshabilitarlas hacé clic derecho en el botón de inicio, seleccioná “Administrador de tareas”, luego la pestaña “Inicio” y deshabilitá las aplicaciones que no querés que se inicien automáticamente.
Si tu PC está llena de aplicaciones que nunca usás podés liberar espacio en el disco y mejorar el rendimiento desinstalándolas directamente. Para esto hacé clic en el botón inicio y escribí “Agregar o quitar programas”. Seleccioná la aplicación que querés desinstalar y hacé clic en “Desinstalar”.
3- Mantené tu sistema operativo actualizado
Windows se actualiza regularmente para mejorar el rendimiento y la seguridad. Podés verificar si tenés actualizaciones pendientes, hacé click en el botón inicio y escribí “Buscar actualizaciones”. Descargá las actualizaciones pendientes e instalalas para disfrutar al máximo de tu PC.
Si te sirvieron estos consejos también podés implementar estos:
4- Modo rendimiento de Windows
Para optimizar el rendimiento de la PC, Windows cuenta con una opción que permite ajustar tanto la apariencia como el rendimiento. Hacé clic en el botón inicio y escribí “Ajustar la apariencia y rendimiento de Windows”. Seleccioná “Ajustar para obtener el mejor rendimiento”. Esto mejorará la performance de tu equipo.
Si tu PC tiene un disco duro mecánico es posible que sufra fragmentación con el tiempo, lo que puede que sea más lento para leer y acceder a los archivos. Para solucionar esto hacé clic en el botón “Inicio” y escribí “Desfragmentar y optimizar unidades”. Seleccioná la unidad que querés optimizar y hacé clic en “Optimizar”.
Así mismo te recomendamos cambiar tu disco duro mecánico por uno de estado sólido, vas a notar un cambio abismal en la velocidad de inicio del sistema operativo y en su funcionamiento en general.
6- Asegurá tus datos
Por último y lo más importante es realizar periódicamente un análisis de nuestra PC en busca de virus o malware que puedan dañar nuestros archivos y comprometer nuestra privacidad. También es importante realizar copias de seguridad de nuestros datos para evitar la pérdida de información importante en caso de un fallo en el sistema o en el hardware.
Para mantener nuestros datos seguros, podemos seguir los siguientes consejos:
- Instalar un software antivirus confiable y actualizarlo regularmente para estar protegidos contra las últimas amenazas de seguridad.
- Evitar descargar archivos sospechosos o de sitios web no confiables, ya que estos pueden contener virus o malware que pueden dañar nuestra PC y nuestros datos.
- Realizar copias de seguridad periódicas de nuestros datos en un disco duro externo o en la nube, para evitar la pérdida de información importante en caso de un fallo en el sistema o en el hardware.
Recordá que estos son solo algunos consejos generales. El rendimiento de una computadora también puede verse afectado por muchos otros factores como la calidad del hardware, la cantidad de RAM, la capacidad del procesador y la presencia de virus o malware.